miércoles, 4 de agosto de 2010

DIABLOS ROJOS "RIU AMUNT"




"Riu amunt", "Tant com puc" o "Sempre apunt" son algunos de los lemas del GECH, grupo escolta de nuestro colegio.

Durante las dos últimas semanas en Tabascan, un pueblecito del Pirineo por encima se Sort y cerca de donde Chiquito perdio la zapatilla, nuestros jovenes escoltas han vivido en plena naturaleza la tradicional acampada de final de curso.

El último fin de semana y como acto final del campamento, se invita a los padres a pasar dos días y poder comprobrar que los niños también son capaces de sobrevivir sin nintendo, sin televisión y sobretodo sin las madres.

En esta situación nos encontramos en Tabascan tres diablos rojos, Pepe, Victor y el que escribe. Tres diablos rojos, una chiquillería importante, una pelota y un trozo de campa con algo parecido a cesped, el partido estaba servido. Inconcientemente nos situamos de un lado Pepe (acompañado de otros padres) y del otro lado Victor y yo, como los viernes por la noche, los niños de entre 6 y 12 años se fueron repartiendo más o menos equitativamente. El partido fue una pasada Pepe muy serio en defensa, bien colocado y casi más preocupado por no pisar a ningún pequeñajo, Victor en su linea alternando grandes jugadas con fallos increibles delante del portero aunque según él el cesped estaba muy alto, entre los pequeños alguno que apunta a figura, un hijo que osó tirarle un caño a su propio padre y los más pequeñitos que no se arrugaron en ningún momento. No se si alguno de estos llegará o no a estrella del fútbol pero por las ganas que le echaron y lo que les gusta el fútbol la continuidad de los diablos rojos está garantizada.

Aparte de los diablos rojos también vimos por los alrededores algunos veteranos ilustres, Manu (nuestro hombre cierre de Monserrat) con el cual compartí un casto baño en una poza del rio y Jose Mª Alarcón que con un grupo de amigos había ido a ver a su hijo, uno de los monitores del GECH.

El domingo acto final con la entrega de certificados y premios a los escoltas más destacados, "pas de branca", despedida de algún monitor y parlamentos varios. Llorera descontrolada, desde la muerte de Chanquete no se recordaba algo igual, aunque tengo que reconocer que en algún momento yo también me emocione.

En definitiva un fin de semana intenso pero muy gratificante, destacar la dedicación altruista de los monitores basada única y exclusivamente en su amor por el GECH y el movimiento escolta, toda una forma de vida.

Dirigido a los monitores "gracias y felicidades"

UN SALUDO
JUAN

2 comentarios:

Juli dijo...

Felicidades por este testimonio. Se que todo lo que cuentas es verdad porque lo he vivido personalmente hace ya bastantes años, pues mis dos hijos Nuri y Juli estuvieron en el CAU. Guardo un bonito recuerdo de esos fines de semana. Un abrazo amigos.

José Mª dijo...

Yo me sumo al sentimiento de Julián, que también he compartido algunos de esos fines de semana de finales de julio. Inolvidables los "espectáculos" del sábado noche con el monitor Abel haciendo y diciciendo de las suyas.
Un saludo
José Mª