La historia de la Humanidad está marcada por un afán
de copiar e intentar mejorar lo que otros han hecho antes que nos ha parecido
prodigioso o diferente. ¿Una muestra? Lo ocurrido este pasado viernes. Hacía pocos
días que Messi, el grandioso futbolista del Fútbol Club Barcelona, y quizás el
mejor que ha existido nunca nos sorprendió con un magnifico gol en el que el esférico
trazó, como por arte de magia, una trayectoria parabólica imposible de detener
por el cancerbero rival. Pues allí nos tienes…la mayoría de los miembros del
Clan de los Diablos Rojos intentando una y mil veces imitar y a poder superar
la proeza del astro argentino. Doy fe de que alguno lo consiguió en una noche
de muchos goles de fantasía.
Andaba repasando hace un rato las estadísticas de
esta temporada y lo cierto es estamos en los mismos números que la anterior. En
14 jornadas 196 asistencias lo que da una media de 14 por partido. ¿Dónde hay que
firmar? Parece que Pepe, el nuevo “Capi” ha sabido devolver la ilusión al
equipo. Pero eso es labor de viernes a viernes y todo está en nuestras manos
cuando decidimos acudir o no a la convocatoria.
Con una asistencia de 14 Diablos Rojos, se disputó
el partido 14 de la presente temporada. Los
EQUIPO AZUL: Fernando, Carlos, Ángel, Paco Romero,
Bernat, José Mª y Juli.
EQUIPO FUCSIA: Pepe, Andrés, Sergio, Eric, Javier,
Raúl y Jordi Jr.
Destacar la reaparición por la Bombonera de Andrés
ausente desde la jornada 8ª (25 de enero) y Javier desde la 10ª (8 de febrero).
Si hubiera que destacar (a veces es feo hacerlo) a
uno de cada equipo sin duda todos estaríamos de acuerdo en señalar a Fernando y
a Javier. Los dos demostraron un fútbol de altura con mucha sabiduría
futbolística el primero y con una energía y ganas contagiosas el segundo. Me
alegra y no es la primera vez que lo expreso, el caso particular de Javier que
cuándo su maltrecha y castigada espalda le da una tregua pone toda la carne en
el asador con una ilusión desbordante.
Hubo ocasiones para todos, Sergio “El Pistolero” se
llevó los balones a casa al conseguir los 3 goles, bueno en realidad es
simbólico porque se los acabó llevando Pepe a su casa. Andrés estuvo un poquito
más flojo de lo que es habitual en él supongo que fruto del largo periodo de
inactividad. Eric peligrosísimo combinando el otro extremo con su padre y Jordi
Jr. masacrando sin piedad la portería rival aunque quizás no olvidará nunca que
le paré un misil tierra-aire con el trasero. Al final un justo empate con
alternancia del marcador.
La hora del Fimons a la que se incorporó Enric nos
juntó a 7 de nosotros alrededor de la mesa. Tomate a go-go, cebolla,
boquerones, bocatas de bella factura, bebidas isotónicas y hasta creo recordar
que algún chupito llevaron la conversación por pacíficos derroteros hasta una
hora bastante avanzada que hacia prudente una discreta retirada.
Y eso fue todo amigos lo que dio de sí la última
jornada.
Hasta pronto.