El pasado 30 de junio celebramos nuestro 26º Torneo,
aunque yo preferiría llamarlo pequeña reunión de amigos del Fútbol de los
Viernes. Un año nefasto con una caída muy importante del número de asistentes
debida a varios motivos: Lesiones de todo tipo, desidia y desinterés por parte
de algunos de nosotros, muchos días de lluvia que han ejercido un efecto
multiplicador en las ausencias, etc.
Confieso que un par de semanas antes del Torneo era
reacio a convocarlo, esperando de antemano una nefasta asistencia. Solo las
conversaciones mantenidas con los más “fieles” me animaron a seguir y a ajustar
el formato a los asistentes. Tenía claro que no podíamos aspirar a tener más de
2 equipos, porque incluso entre los asistentes había gente muy tocada jugando
en estado precario. Y luego el capitulo de las traiciones de última hora a 10
minutos de empezar…
Quiero agradecer la asistencia de todos los que
pudieron acercarse a jugar, a ver el partido, a la comida, etc. De modo
especial quiero agradecer a Pepe el venir a la comida habiendo tenido en la
misma semana la importante intervención quirúrgica de su padre, a Javier
dispuesto a que esto se celebrara aunque le petara la espalda, a Alex Figuerola
con problemas físicos toda la temporada y que no dudó en ayudarnos, a Toni con
cuadraturas imposibles del trabajo, a Javi con problemas de ajuste de horarios
familiares hasta ultimísima hora, a Ramón al que arrancamos la segunda
asistencia de la temporada, a Pedro Alvarez que además de arrastrar problemas
físicos se trajo a toda la familia como “suporters” aguantando un sol de
justicia toda la mañana, a Enric, Paco Caminante, Fernando, Joaquín y Jordi
Ranz que estuvieron de espectadores…
En total nos juntamos 19 para un superpartidazo. Los
equipos fueron los siguientes:
EQUIPO AZUL: Sergio Marín, Jordi Jr., Paco Romero,
José Mª Peleato, Eric, Aurelio, Andrés, Alex Figuerola y Sergio. (9)
EQUIPO FUCSIA. Pedro Alvarez, Paco Villar, Ramón, Javi,
Alex G, Raúl, Javier, Manel, Toni y Juli (10).
Resaltar el debut en la Bombonera de Alex G, el hijo
mayor de Javi. En el corrillo central y antes de empezar el partido entregamos
a Jordi Jr. un marco con el anagrama de los Diablos Rojos que luego firmamos
todos los asistentes.
El partido se jugó con las dimensiones de los
viernes y con 6 jugadores de campo y portero. Los cambios se fueron sucediendo
con regularidad y de un modo espontáneo.
Gran intensidad, con mucho calor y con una duración
de casi 2 horas del partido.
Después del partido la gran mayoría estuvimos en el
Fimons tomando algún refresco y haciendo un poquito de tiempo antes de ir al
Pipa-5 donde ya teníamos reservada mesa para 16.
Buen ambiente en todo momento y un perfecto final de
temporada.
Ahora toca el descanso del verano y alguno como un
servidor le dará vueltas a la cabeza sobre si es posible intentar seguir con
algo que dura hace muchos años pero que muchos del grupo han abandonado o no
están dispuestos a “sacrificar” algún viernes para que se pueda jugar.
Gracias a todos por vuestra atención, ayuda e
interés.
Felices vacaciones.