El huerto de Salva.

A veces las casualidades, el destino, la alineación de los astros o simplemente la suerte se juntan para hacer que un día sea especial. Esto ocurrió este viernes pasado. Nada más, ni nada menos, que 4 Diablos Rojos decidieron que era el viernes para volver a la Bombonera después de un largo eclipse. Repasemos brevemente todos los casos: Bernat, ausente desde la jornada 9 de la temporada pasada (17-11-2017), Peter sin aparecer desde la jornada 11 de la anterior temporada (15-12-2017), Jordi Ranz desde la jornada 16 del curso pasado (09-03-2018) y Xavi Pont desde la jornada 17 (16-03-2018). Por supuesto que detrás de cada caso particular ha habido una serie de condicionantes para que se diera esa prolongada ausencia. Todos, absolutamente todos, son bienvenidos a esta su casa y esperemos que su segunda aparición no sea dentro de un año. Con estos 4 “recuperados” la cifra alcanzó por segunda vez y de manera consecutiva los 18 asistentes.

La jornada 4ª de la temporada 27ª deparó las siguientes alineaciones:

EQUIPO A: Pepe, Paco Villar, Angel, Javi, Toni y Kike.

EQUIPO B: Pedro Álvarez, Paco Romero, Eric, Isidro, Peter y Sergio Marín.

EQUIPO C: Andrés, Jordi Jr., Jordi Ranz, Xavi Pont, Bernat y Sergio Bandeira.

Iniciaron los enfrentamientos el equipo A contra el B. En la banda Javier (de recogepelotas) y un servidor controlando los tiempos.

A Pepe, nuestro Capi, se le fue un poco la mano esta semana en la confección de los equipos, sobre todo dejando muy desasistido el equipo C que alineaba en sus filas a 3 de los 4 recuperados. Andrés hizo lo que pudo con ese equipo ya que Jordi Jr. tuvo muchos altibajos durante todo el partido. El equipo B algo mejor con Pedro Alvarez llevando el peso del equipo y teniendo a Isidro y Eric como los máximos valedores del equipo. Peter estuvo algo flojo acusando sin duda los muchos meses de inactividad. El equipo A estuvo pletórico y abusó de la superioridad. Kike mandaba, detrás Toni y Paco Villar imponían su ley y por delante Javi y Angel fueron implacables. Nuestro capi estuvo regular, acusando las molestias del talón que ya llevan mucho tiempo condicionándolo.

La hora del Fimons nos reunió a 8 de nosotros, coincidiendo en el local con Enric y su hija Mariona. El tradicional plato de tomate (nos consta que el huerto es de varias hectáreas y vamos a tener este fruto de la tierra por mucho tiempo garantizado) con cebolla. Boquerones que no falten y esta vez bocadillos siendo el más pedido el de salsichas con pimientos. Cervezas, amena conversación, risas y los cacahuetes del final hicieron que la velada nos llevara a bien avanzada la noche.

Y esto fue todo lo que aconteció en esta jornada. Os esperamos a todos el próximo 19 de octubre (el 12 es festivo).

Hasta pronto amigos.