Las grandes noches empiezan muchas veces improvisando sobre
la marcha. Eso fue más o menos lo que nos ocurrió este viernes por la noche a 5
Diablos Rojos.
Todo empezó por el tema de que no teníamos fútbol al haber
en la Bombonera la celebración de la ESO, en la que por cierto estaba la hija
de Enric, nuestro Presi. Lo esperamos, no teníamos problema, hasta las 10 y
pico de la noche. Toni no pudo estar a última hora por tener a su hijo Pau
malito. Nos juntamos como ya viene siendo habitual en los casos en que hay Plan
B: Enric, Peter, Paco Villar, Manolo y Juli.
Manolo se estrenó oficialmente como integrante del Núcleo
Duro y tuvo (a tenor de la fotografía que encabeza esta reseña) una de las
mejores noches de los último tiempos.
Nuestro Presi nos sugirió una visita al “Gavinet” un
tapas-bar en el Borne con buena calidad y buen precio. Hablamos, reímos,
brindamos, bebimos, bebimos más y las horas fueron pasando en lo que sería una
larga noche. Nos dirigimos a pie a tomar la última al cercano “Tripode” donde
nos envolvió la agradable música de antaño. Todo transcurrió con normalidad
hasta que a una hora muy prudente (como es habitual en nosotros) decidimos
retirarnos a “cocheras”. Y volvió a pasar amigos…
Estábamos tranquilamente enfilando el camino de regreso
cuándo una potente luz nos enfocó desde el cielo y lo que creímos que era una
especie de “nave nodriza” nos elevó materialmente al cielo. Es lo último que recordamos,
somos incapaces de saber que ocurrió luego. Habían pasado unas pocas horas y
nos encontramos nuevamente con el coche en marcha en medio de la autopista
camino de casa. No sabemos qué clase de experimentos ni estudios nos hicieron,
nadie recordaba nada, en mi móvil solo la foto que encabeza esta reseña en la
que se puede observar pletóricos a Manolo y Peter.
Había ocurrido otras veces, una extraña abducción, y
esperamos que no sea la última.
Y esto es todo amigos, hasta pronto.
P.D. Los días en que no tenemos fútbol hay Plan B, déjate
abducir junto a tus amigos los Diablo Rojos.
2 comentarios:
A mí me da que la foto está cortada... ¿Algo que ocultar...?.
¡P'habernos matao!. Efectivamente, una de mis noches más... divertidas de los últimos tiempos; sin duda.
Esto hay que vivirlo , no se puede contar porque la gente no se lo cree,bienvenido Manolo al club de los elegidos......vaya noche mas guai que pasamos...Un abrazo del Peter
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