Tiros parabólicos y balones perdidos.

A los que somos habituales de la Bombonera nos cuentan lo que pasó este viernes pasado y no nos lo creemos a menos que lo viviéramos en primera persona. Llevaríamos unos 20 minutos de partido cuándo uno de nuestros jóvenes valores con el ímpetu propio de la edad puso el balón en órbita regular sobre la Tierra, es decir la coló en el vecindario. Todos sabemos por ocasiones anteriores que esos balones no se recuperan jamás y los vecinos no los devuelven. Tuvimos que seguir jugando con el segundo balón y no habrían pasado ni cinco minutos de lo anterior cuando nuevamente uno de nosotros lo hizo atravesar la valla y lo situó donde el anterior. Fin del partido y para casa (creo que es la primera vez que nos pasa en tantos años). Pero no convencido de eso nuestro buen amigo Xavi Pont se fue a la calle, llamó a casa de los vecinos, soportó una dura crítica y salió airoso con los dos balones bajo el brazo.

A parte de esta anécdota sucedieron más cosas en la Bombonera y en la cena posterior. Vamos a repasarlo brevemente.

Jornada con buena cifra de asistencia: 22. Cuando recuperemos todos los lesionados, perdidos o extraviados etc. rondaremos fácilmente la cifra de 30.

No pudo estar con nosotros Pepe (ejerciendo de padre ejemplar), ni Peter (celebración del aniversario de su señora esposa), Pedro Piedra (en tierras gallegas), Juanmi lesionado que casi ya está a punto para reincorporarse, Jordi Ranz que disculpó su ausencia al igual que Bernat, Jordi Jr. con temas de trabajo, Aitor de viaje, Iván al que espero no tardemos otros dos años en volver a ver,  Ramón festejando cumpleaños de compañeros de mili, Tato desaparecido y Víctor que ha pasado ya oficialmente a las “Viejas Glorias Retiradas”. Estábamos pendientes también de Juan que nos tiene muy olvidados y que está en unas negociaciones que mucho nos tememos no quiere ganar. En contrapartida reapareció esta temporada en la Bombonera nuestro amigo Dani “Twister” que anda con mucho pluriempleo futbolístico y también Paquito Romero.  Quiero desde aquí aprovechar para mandar un fuerte abrazo a nuestro Diablo Rojo Fran que sabemos a ciencia cierta que volverá a vestirse de corto con nosotros.

Con todo este panorama y después de una aparición “estelar” de última hora de un veterano Diablo Rojo, la cosa quedó de la siguiente manera:

EQUIPO A: Alex, Sergio Bandeira, Xavi Pont, Andrés, Paco Romero, Paquito Romero, Isidro (7)

EQUIPO B: Manolo, Javier, Dani Twister, Raúl, Sergio Marín, Pol, Aurelio y Juli Aranda (8)

EQUIPO C: Javi, Paco Villar, Toni, José Mª, Kike, Ángel  y Juli (7)

Descansó en primer lugar el equipo C.

Partidos en general muy disputados, muchas caídas y encontronazos, pero buena jornada de buen fútbol en armonía como es costumbre en las “Noches Mágicas de los Viernes”. En el equipo A hicieron diabluras Alex con Xavi Pont y Paco Romero casi se bastaba solo en defensa. Muy esforzados estuvieron Manolo, Javier, Dani y Raul en el B, asistidos en defensa por los buenos oficios de Pol y  Juli Aranda al que queremos ver todas las semanas en la Bombonera. Estuvo muy acertado Aurelio en la portería. Kike, Javi y Angel llevaban en sus botas todo el veneno del C,  lastrado por el que esto escribe en una noche nefasta.

A la hora de la cena nos juntamos 9 al final incluyendo al Presi que no quiso perderse el evento. Había un “pacto de no agresión” en cuanto a los temas a debatir en la noche y se respetó. Magníficas torradas de lomo con queso y pimientos ofrecidas por Manolo, nuestro anfitrión. Hubo cervezas y mucho dialogo gratificante. Aunque parezca mentira a las dos de la madrugada un grupo de 4 de nosotros estaba enzarzado en una partida de ajedrez, si habéis leído bien amigos: ajedrez. El Gran Maestro Avellaneda consiguió hacer doblar la rodilla a 3 rivales y tuvimos que escucharle todo el resto de la noche con la humildad que le caracteriza.

Y esto fue todo amigos en una noche que ocurrió un poco de todo y de lo cual guardamos constancia en nuestro particular “Cuaderno de Bitácora”.